9 de abril de 2009

Fruits Basket

Tooru: La manera en la que haces las bolas de arroz es espléndida. ¡Asombroso! Estoy sorprendida. Kyo: Naturalmente cocinaba para mí cuando estaba entrenando, pero no siempre es lo mismo el guiso y el sabor. Tooru: Pero creo que cualquiera que se entrenara para hacer bolas de arroz, te envidiaría. Porque lo haces muy bien. Kyo: ¿¡Quién está entrenando para hacer algo así?! ¡Mierda! ¿De dónde sacará ideas como esa? Kyo se va. Tooru piensa en voz alta. Tooru: El hecho de que era impresionante no cambiaba, aunque...¿Por qué no se daba cuenta de ello? Tooru le sigue. Tooru: Ah...podía ser que estubiera colocada en la espalda. Kyo: ¿Qué? Tooru: Por ejemplo, supón que las cosas maravillosas que tiene una persona fuera el umeboshi (ciruela salada) de la bola de arroz, podría ser que esta ciruela estubiera colocada en la espalda... Cuenta la historia de una pequeña bola de arroz. Tooru: Las gentes de todo el mundo tendríamos en la espalda una ciruela de diferentes formas, colores y gustos. Pero debido a que está en la espalda no podríamos ver nuestra propia ciruela. Bola de arroz: Yo no tengo nada...solo soy una bola de arroz blanca. Tooru: Y eso es lo que pensaríamos aunque tubiesemos una ciruela en la espalda. Y es posible que si sentimos envidia por alguien es porque nosotros podemos ver la ciruela que tiene esa persona. Yo también la veo. La veo perfectamente. La espléndida ciruela que hay en tu espalda, Kyo. Yuki es maravilloso y tu Kyo eres maravilloso. Kyo se enfada. Kyo: ¡Pero otra vez! ¡¿Se puede saber de donde sacas esas ideas?! Y además, ¿por qué tiene que ser una ciruela? Tooru: Lo siento, también puede ser salmón. Disculpa, tengo la cena en el fuego. Tooru se levanta decidida a salir de la habitación. Kyo: Oye... Tooru: ¿Sí? Kyo: Tu también la tienes en la espalda... una ciruela. Yo la veo. Tooru: ¿De verdad? Kyo asiente. Kyo: Aunque no creas es una ciruela muy pequeña. Tooru asiente felizmente. Tooru: Me encantan las ciruelas pequeñas. Kyo: ¡Pero es muy muy chiquitina eh! Tooru piensa: Sí, quizás ahora alguien me esté envidiando... tal vez admire algo de mi que yo misma ignoro. Cuando pienso en ello, siento que podría esforzarme un poco, un poquito más. Vuelve mi vena friki...

2 comentarios:

Behk dijo...

Esta conversación de la serie me encanta. Estaba buscándola para conservarla porque ya casi no recordaba como era y me alegró un montón que la hayas publicado.
Bienhallada.

Unknown dijo...

Muchísimas gracias!
Aunque sea una serie un poco infantil, admiro mucho la facilidad con la que consigue expresar muchas preocupaciones que realmente tenemos día a día. Y ayuda a sentirse comprendido.

Me alegro de que te haya sido de ayuda! Besiitos!