22 de julio de 2009

Y sí, seguiremos...

El dolor de la incomodidad.
El sufrimiento de no encontrarte en un lugar y la necesidad de escapar.
Sueño con la simple idea de volar libremente con mi potencial y el impulso de la independencia...
Pero esa ayuda sigue sin ser lo suficientemente fuerte como para poder huir de este infierno, no tengo el suficiente impulso necesario.
El mayor peso es el tiempo. Lento cuando más necesito que corra. Empujo las manecillas de los segundos con ansiedad, pero las condenadas pesan demasiado y mientras ellas ríen a carcajadas, mis lágrimas recorren mi mejilla desconsoladamente.
Mi manera de superar esta espera eterna se a transformado de dolor a impasibilidad. Sin sentimientos, no hay dolor. Sin sentimientos tampoco hay placer. Es el precio que acepto pagar para el pase a una vida mejor, o eso pensaba.
Pero no puedo... mi ser es un mar de sentimientos, una explosión de sentidos que necesitan flotar hacia la superficie y chillar a voz alta y clara lo que pienso, lo que necesito, lo que me duele...
Probablemente nadie me espera allí, en ese lugar con el que tanto sueño, pero necesito aspirar profundamente ese aire y sentirme por fin decisivamente, en casa.
Tras el movimiento de esas malditas agujas conocí razones por las que pensar que este lugar no está tan podrido como mi boca expresaba cuando mis ojos sufrían tras no poder más.
Con la facilidad que cambia mi inestable estado de ánimo solo reflexionando mientras mis dedos se deslizan por las teclas del saber. Mis ganas de luchar, levantarme y devolver el puñetazo con más fuerza vuelven a mi mente. Puede que el impulso que necesite no sea la independencia... sino el apoyo de quienes consiguen hacerme feliz.
Y por supuesto, el sentirme comprendida por los pequeños y despreocupados besitos que consiguen entender mi sueño, ya que es mutuo. Un dolor compartido, un sueño para dos.

18 de julio de 2009

The eye...

Esos ojos, esa mirada, esos gestos, confían en encontrar todo lo que consigues de mi. Sedientos se esconden sin ninguna timidez, para poder saciarse y continuar espiándome como un nuevo ser que tus pupilas persiguen con ansias, vigilando cada uno de mis movimientos, siguiendo cada sonrisa para obtener el mayor número de imágenes que demuestren lo atractivamente feliz que se vuelven mis labios cuando son observados por ti. Esas pestañas, ángeles de luz que pliegan sus alas donde deslumbran mis sentidos con el color de tus preciosos ojos.
Como pequeños dulces de placer, recorren montes marrones salpicados de un amarillo difícil de descubrir y serpenteantes tonos oscurecidos como forma de tu fija mirada. Contemplan indagando en mi cuerpo mi mayor regalo que te ofrecí, mi corazón revosante de amor que palpita sonrojado por esa mirada. Asoman su brillo con gran esplendor si sorprendo a tu mente. Se hidratan hasta que su pena se desborda y se desprende de esos ojos para seguir dejando señal por tu mejilla cada vez que temes el hacerme sufrir. Mientras que se estremecen creando arrugas de gozo en sus piernas cuando consigo demostrarte todo lo mio que ya es tuyo. Y tu consigues regalarme la belleza de la vida al ser acariciada por esos gestos.
Tu y tus ojos, tu y tu mirada, tu y tus gestos, unidos en un ser. En miles de sentimientos que me roban trocito a trocito mi miedo a sufrir, provocando que tu amor espolvoreado ocupe ese lugar.

9 de julio de 2009

Sí, te quiero =)

Tras un año, he vuelto, tras un año de sufrimiento, dolor y desgracia, vuelvo a llorar, pero con una gran diferencia, esta vez de alegría.
Cuando todos decían que ya era hora, todavía esperaba en la estación a mi autobus. Pero creo que aunque es tarde (y es que lo es), sin darme cuenta me ví bajándome en mi parada.
Tengo tantísimas cosas que hacer, tanto que quería aprender este verano, y que sé que no me va a dar tiempo a hacer, pero disfruto con el simple hecho que he vuelto a ser la curiosa que muere por hacerlo todo y no parar nunca.
Vuelve esa sonrisa salvaje y esa risa alocada. Vuelvo a ser la que era, la transparente y animada chica inocente que le encanta decir que todo le encanta, que no para de hablar y que intenta hacerse siempre la fuerte aunque sabe que es la más débil de todas.
Mis lágrimas hoy son derramadas, pero de alegría. Lloro, pero de alegría, lloro y así, gracias a ti. Gracias por esta noche, gracias por hacerme reir, gracias por conseguir que sea de nuevo feliz, gracias por todo, y sobre todo gracias por quererme, porque yo te quiero tanto...

8 de julio de 2009

Me supera...

Humanos, seres despreciables y egoístas que solo miran por su bien, que solo cuidan tus espaldas para tener quien se las cuide a ellos.
Siempre mirando en beneficio propio y en su mejor cata del primer bocado. Si hacen algo por los demás egocentridad encontrareis en ese acto, porque es su forma de sentirse realizado de manera que los demás vean con buenos ojos y así ganarse a otra persona más.
Su mayor ideal es el orgullo, algo que tiene que quedar intacto y que debe de alimentarse del de los demás a partir del menosprecio y la superioridad ante ellos.
También gana gran importancia la imagen, lo que piensen los demás y lo destacable que llegan a ser para los demás humanos.
Yo a estos no los considero humanos, los considero la mierda del mundo, el cáncer de la sociedad.
Inútiles e incultos que viven el día a día sin pensar en nada más que la felicidad actual aunque se base en el sufrir de otros.
Y lo peor de todos es que el mundo está plagado de ellos, inconscientes de lo que poseen y de como lo mal utilizan.
Deberían de ser ellos los que se encontrasen bajo el sol andando kilómetros para conseguir un asqueroso cuenco de agua no potable para beber ese día, ya se darían cuenta de que hay muchísimas cosas más importantes en la vida como para estar malgantándola de la manera como viven, e ir destrozándoselas a otras personas.

El precio de un beso.

Dame un besito, pequeño y dulce. De esos que tanto me gustan, y que me hacen tan feliz. Que tu rostro se acerque poco a poco hasta que cerremos los ojos, pongamos morritos y tus labios me transmitan la energía de tu amor por mi en ese gesto sonoro.
¿Quién no ha sentido esto alguna vez? Todos pensamos en alguien de nuestro pasado, de nuestro presento o de un posible futuro al imaginarnos en esa situación única e inigualable.
Todos piensan que el apetito sexual masculino es mayor que el femenino. No tiene por qué ser así, lo que pasa es que la mujeres anteponemos los sentimientos provocando que nos lo pensemos dos veces antes de tirarnos encima de la presa.
Para nosotras ese beso tiene que ser especial. Por eso el llamadofeeling es de mayor importancia entre mujeres que hombres, aunque siempre hay excepciones.
El valor de un beso es mayor dependiendo del lugar: en Japón, al saludarse no mantienen contacto físico así como muestra de respeto; en Italia el abrazo está muy propagado como muestra de afecto; mientras que en Bélgica lo tradicional son los tres besos, dos en la mejilla izquierda y uno en la derecha alternándose.
Está demostrado científicamente que la acción de dar un beso activa una zona del cerebro que produce hormonas que provocan la sensación de placer, afecto, comodidad y bienestar.
¡Ay Dios, con lo besucona que soy yo!

1 de julio de 2009

Y volver a disfrutar

Llega el verano y pisamos las vacaciones con chanclas y la toalla en los hombros.
Todos huimos queriendo visitar nuevos países un par de semanas, tanto para aprender idiomas como para el simple hecho de decir que ha estado fuera de España.
Empecé a disfrutar del solecito con la idea de no salir del país, sino de disfrutar de otro lugares dentro de mi comunidad. Pero es que no puedo anclarme a este lugar, me deprime, o mejor dicho, me deprimen. Así que cambié mis planes para irme a ese trocito de dulzura del que tantísimo hablo siempre y de manera convincente.
Contacté con algunos familiares y amigos y me comentaron que últimamente allí hace mucho calor (insólito pero cierto), unos 30º por lo que me han comunicado. ¡Pero si es que me lo están pidiendo a gritos! Necesito ubicarme un tiempo allí y despejarme un poco, descansar o simplemente cambiar de aires.
Fui en febrero, pero me pareció tan corto el viaje que me da la sensación que hace siglos que no les veo... y este verano supongo que será diferente, o eso espero.
Mi duda de si darme ese paseito o no desapareció cuando aparqué mis temores de alejarme de aquí. El hecho de estar lejos de mis seres queridos me hace mal, pero he aprendido que no puedo dejarme llevar por eso, ya que la que verdaderamente sale perdiendo soy yo misma y nadie más.
Supongo que dentro de un mes tendreis una visitante de nuevo en vuestras tierras.