25 de diciembre de 2008

Cuéntame un cuento...

Hacía frío, mucho frío. Las gotas de lluvía caían sobre mi cabeza agravando el camino hasta encontrarle. Podía sentir como en cada paso mis cansados tobillos se tambaleaban sobre el fino tacón de mis nuevos Manolo Blahnik celestes, sucios y mojados a causa de los charcos en las calles. La noche ya se había cubierto con el manto de la oscuridad y las estrellas pintaban el cielo como un precioso cuadro de Vincent Van Gogh, uno de mis artistas favoritos y otro incomprendido del amor. Al pasar por un escaparate de las grandes tiendas del centro, observé durante unos segundos mi reflejo en él: estaba horrible. Mi vestido negro estaba empapado, los tirabuzones del pelo ya habían desaparecido, las medias estaban rasgadas y todo el maquillaje corrido. Nunca me había visto tan mal. Pero no me iba a echar ahora para atrás, ya no. Había dado demasiado por él, gasté mucho tiempo y esfuerzo para estar esa noche espectacular, pero pasase lo que pasase, tenía que hacer lo que el corazón de dictaba. Al doblar la esquina tropecé con una pareja que paseaban bajo el paraguas mientras el muchacho tenía posado su brazo sobre los hombros de la chica. Los dos jóvenes fueron sorprendidos tras mi interrupción de su rutinaria pero romántica caminata de vuelta a casa. Miré mi reloj...las once y cincuenta y tres, no me daba tiempo a llegar. Era imposible que la suerte estubiese tan de mi lado como parar darme la oportunidad de decirle lo que siento y recibir el beso de mi amado, y acabar con la maldición con la que cargaba desde hacía ya tantísimo tiempo. En un intento de aligerar el paso, mis debilitados tobillos me fallaron de nuevo, pero esta vez cayéndome al suelo. Fue eterno...todo había sucedido tan deprisa. Tantas risas, tantos abrazos, tantas caricias... y todo ello acabado en esto. Era mi último día para poder acabar con esto y yo en el suelo, bajo la lluvia, herida físicamente y de amor. No podía aguantarlo más... por mucho que lo intentaba ellas luchaban por salir desesperadamente, pero yo me negaba a ello, y cuando me dí cuenta... ya habían salido. Mis lágrimas recorrían toda mi cara camuflándose con las gotas frías que caían del cielo... no podía parar de llorar. En ese preciso momento sentí tras de mí una presencia, una cálida y seca mano rozó mi hombro hasta llegar a mi mano y cogerla con gran sutileza. Yo erguí la espalda y le miré avergonzada. Mi corazón iba a mil por hora, no podía creerlo, al final se iba a hacer realidad, las hadas me habían escuchado y comprendieron que necesitaba ayuda. ¡Él estaba aquí! A mi lado, preocupado por mí y tratándome como lo que era, una princesa.

Al alzar la vista hacia mi salvador mi corazón se hizo añicos al descubrir que el hombre que me había ayudado a levantarme de mi dolorosa caida no era él. Volví a romper a llorar. Él, preocupado pero tranquilo, me anunció con voz serena: "Se me rompe el corazón ver a tan bella mujer sufriendo. Daría mi vida por que esa pasión que demuestran tus lágrimas la sintieses por mí, porque lo daría todo por tí". En ese preciso instante dejó caer el paraguas al suelo y se arodilló ante mí, lentamente puso sus manos sobre mis mejillas... y bajo la lluvia, los dos mojados y tiritando, nos besamos hasta que fuimos descubiertos por la luz del amanecer. Asombrosamente, cuando nos separamos pudimos observar que ya ¡no estabamos mojados! Mi vestido estaba deslumbrante y su traje negro estaba impoluto. Había dejado de llover y el sol brillaba más que nunca. Él me volvió a mirar y entonces fué cuando entendí que verdaderamente él era mi príncipe. Rodeé firmemente su cintura mientras él me apretaba fuertemente contra su pecho y me susurraba al oido: "Ya se acabó todo... no temas porque ya estás a salvo". Por última vez rompí a llorar... pero esta vez de la felicidad que recorría todo mi cuerpo hasta rebosar mi corazón sediento de amor.

19 de diciembre de 2008

¡Ya basta de tecnicismos!

Que la gente solo quiere leer simples y breves textos que hablen de situaciones con las que se sienten identificadas y así hacer que su alivio supere a su preocupación de como acabar con el problema. Haced un pequeño esfuerzo y entregaros más a la imaginación y la curiosidad de nuestra lengua y estad siempre abiertos a aumentar nuestra capacidad lingüística. ¡Con el arte con el que se puede embellecer una sencilla frase con cuatro metáforas, una pizca de educación y espolvoreado con un poco de respeto! Es necesario el fomento para incrementar el nivel cultural de nuestra lengua entre la población media, ya que como dice mi gran colega Christian Gálvez, el hablar bien es gratis. Y para ello recomiendo crear el ámbito que casi todo ser viviente odia injustificadamente: leer. No son concientes de la riqueza de conocimiento que se obtiene en muchos aspectos diferentes como la ampliación de la cultura gramatical, el cotidiano uso de palabras más cultas y el aumento de la imaginación. Y como mi intención no es aburrir a los lectores del presente blog, finalizo esta pequeña entrada agradeciendo a los seguidores que se molestan en visitar esta página y leerme, ya que siempre tengo algo que decir, y nunca me callo por el simple hecho de que no me da la gana. Para concluir, adjunto una cita de un importante filósofo sevillano influyente entre los miembros del Consejo de Sabios: "Prohíben las drogas y to' los borregos corriendo, deberían prohibir los libros pa' que os diera morbo leerlos."

14 de diciembre de 2008

El ultimatum

Cuando ví en mi calendario lo poquito que quedaba para que se acabase el frío y romántico mes de Diciembre, llegué a la conclusión de que podía cambiar el rumbo de los sucesos ocurridos y la importancia de cada recuerdo de este año que ya me pisaba los talones. Y como bicho malo nunca muere, el número 2 seguía formando parte de las dudas y contradicciones de mi vida.

Habeis venido a despertar mi alegría y felicidad, tengo tantas cosas que contar...
Entonces procedí a acabar bien el 2oo8 con un poquito de todo y con todos. Bien acompañada amisté con nuevas y antiguas personas, fui a partidos de fútbol de mis amigos y con mis amigos, dormí en mi cama y en cama de otros, fuimos palomas pero sin volar, lloré e hice llorar, bebí por sed y por diversión, perdí y me divertí con ello, nos quejamos de no tener playa viviendo en la costa, me pegaron y con amor, canté hasta quedarme afónica y chillé hasta recobrar la voz, soñé y estaba despierta, insulté demostrándo lo mucho que me importa, me compré dos vestidos para una sola noche, y me enamoré estando ya enamorada. Y cuento los eternos segundos que quedan hasta poder sumar a la lista de recuerdos otra tanda más de grandes momentos, pero esta vez tratándose de 4 en 4.

6 de diciembre de 2008

Diario "El Romance"

El día 3 de Diciembre, pasado martes, se acordó la firma del Tratado de paz entre dos países en guerra y proclamándose Bélgica como país independiente obligando a que estos dos países invasores replegasen a los soldados que se encontraban allí con la finalidad de conquistarla.
Se aprobó la nueva Constitución, la del 2008, donde se recoge las ideas básicas del movimiento político que predominaba en el país, presentados aquí algunos de los artículos decretados:
Art. 2: Se mantiene el principio de la soberanía pasional.
Art. 5: Se acepta una ampliación de los derechos sentimentales, como la libertad de reunión, opinión, elección, sinceridad, etc.
Art. 8: Se promulgó la nueva ley de la Felicidad con la cual se obliga a todos los habitantes de este país a satisfacer todas sus necesidades básicas para conseguir la estabilidad política y promover la felicidad.
Art. 11: Se le concede aún más poder al Consejo de Sabios ya que se ha demostrado una vez más que sus predicciones siempre se han llevado a cabo sabiendo que su margen de error es cero.
Art. 16: Se suprime la lista de puntos, defectos y virtudes.
Art. 21: Se crea la nueva orden de reunión de F's con el mínimo de una vez cada dos semanas, concentrándonos en la tienda de chuches.
Art. 28: Niega el prejuicio hacia personas desconocidas, sino crear la propia opinión sobre esa persona a partir de la propia experiencia (artículo siempre decretado en todas las anteriores constituciones).
Art. 32: Se elaboró la Ley General de Universitarios, que regula la formación para llegar a la universidad ofreciéndo la posibilidad de traslado a Granada con el grupo selecto de amistades necesarias para poder llevar a cabo el artículo 8.
Art. 36: Estado confesional a la creencia en la magia.
I just wanna live!!*